Denuncian que ocho mil familias indígenas corren peligro por las llamas. Nelson Sandoval, misionero en la Misión los Ángeles del Tukuko, alerta que familias de la zona están perdiendo sus conucos, por lo que no tendrán alimentos
«Las cuencas de los ríos Toromo, Kunana y Yasa están ardiendo y el humo ya comenzó a afectar drásticamente a nuestros niños yucpas”, así lo confirmó Fray Nelson Sandoval, misionero capuchino de la iglesia Corazón de Jesús, ubicada en la Misión los Ángeles del Tukuko, desde el piedemonte de la serranía, en el municipio Machiques de Perijá. Alertó a las autoridades zulianas sobre la situación que se vive en la Sierra, luego de que el pasado enero iniciara un incendio forestal.
«Cuando todos pensábamos que el fuego se había sofocado, este jueves se reinició con unas llamaradas muy altas e intensas y a pesar de que yo el lunes, a través de los medios de comunicación, di a conocer la noticia no sucede nada, las instituciones pertinentes no hacen nada al respecto mientras que aquí todo es peor», denunció el religioso en entrevista telefónica con este rotativo.
El párroco señaló que en el Tukuko hay «problemas graves» con los niños recién nacidos. «Problemas respiratorios porque estamos inhalando humo desde hace mes y medio y los niños son los más afectados, el ambulatorio Rural II Tukuko, no se da abasto para tantos casos porque además no hay medicamentos y tienen que enviar a los niños al hospital de Machiques».
Alarma
Destacó que las llamas acaban con conucos de familias que habitan en la zona. «Eso significa que esas familias durante este año y parte del que viene, no van a tener qué comer porque se les quemó su siembra y van a pasar hambre».
Sandoval catalogó la situación como una «emergencia ecológica que se está transformando a emergencia sanitaria. Yo comenzaría a decir que es una emergencia humanitaria».
La cuenca del río Tukuko cuenta con la mayor concentración de población yucpa, con ocho mil personas, y al menos el 40 por ciento ya está afectado por las llamas. «Los que están en la parte alta de la montaña, que son 18 comunidades, están siendo afectados directamente en este momento por el fuego y tampoco tienen agua».
Nelson Sandoval aseguró que Inparques, el Ministerio del Ambiente y la Gobernación del estado Zulia están al tanto de la situación, pero que aseguran no tener recursos para actuar. «Aquí hay un puesto de guardaparques y no han hecho nada por apagar el fuego que inició en enero (…) Esperan que sean los incendios de esas magnitudes más grandes y que el fuego consuma la flora, fauna y suelos para que ellos vengan a actuar. Han permitido que el fuego tome fuerza, ellos se defienden diciendo que tienen 11 bomberos, pues que traigan bomberos de otras ciudades como antes, porque no hay excusa».
