Nunca antes una comunidad indígena había condenado a alguien por el delito de feminicidio. Pero este 10 de febrero, la Asamblea de Justicia de Indígenas Nasa del resguardo de Tacueyó (Cauca) dio el primer paso, al condenar por este crimen a 30 años de prisión a Germán Antonio Osorio, alias Sangre, un presunto miembros de las Farc.
Los hechos que dieron lugar a la condena ocurrieron el 28 de agosto de 2016. En medio de las fiestas regionales que se celebraban por esos días, Osorio asesinó a su compañera sentimental, Ninfa Isabel Mosquera, quien formaba parte del Colectivo de mujeres de la comunidad. El homicidio habría ocurrido cuando la mujer trató de impedir que Osorio hiciera disparos al aire en medio de la celebración.
Desde el primer momento, las autoridades indígenas buscaron el apoyo de la Fiscalía para la inspección técnica a cadáver y el aseguramiento temporal del agresor. Además de las declaraciones de la comunidad, existían pruebas de que el condenado presuntamente “tenía problemas con la ley… que era militante de las Farc y se le había visto de camuflado con armas”.
De hecho, tras la captura del hombre el pasado 5 de febrero, las autoridades de la comunidad fueron amenazadas. No obstante, el proceso siguió adelante y el pasado 9 de febrero, la Asamblea General de Indígenas Nasa de ese resguardo comenzó el juicio en contra de Osorio.
Durante todo el proceso Germán Antonio Osorio estuvo custodiado por 14 miembros de la Guardía. En la etapa del juicio, el ente investigador “asistió en calidad de observador, con un equipo de la Dirección Nacional de Seccionales y Seguridad Ciudadana, en cabeza de una fiscal destacada para Asuntos Indígenas”, informó la entidad.
Alias Sangre será trasladado por el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), a la cárcel de San Isidro de Popayán, donde cumplirá la condena que le fue impuesta por las autoridades indígenas.
