El alcalde de Uribia Luis Solano Redondo no respondió los requerimientos que la Superintendencia de Salud le hizo en cuanto a la situación del hospital de Nazareth en la Alta Guajira, el cual se encuentra bloqueado por autoridades tradicionales que piden la reelección de la exgerente Claudia Henríquez.
En una comunicación enviada por la Supersalud al líder Marcos Jarariyú, se le explica que se pidió al mandatario las actas de la junta directiva, el acta de posesión de la gerente, la última evaluación de su plan de gestión y el acto administrativo por medio del cual acepta o niega la reelección.
El organismo asegura que Solano envió todo lo relacionado con el hospital Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de Uribia, pero no la documentación del hospital de Nazareth, por lo que se le solicitó nuevamente y están a la espera de la misma.
Mientras tanto en el centro asistencial permanecen las autoridades tradicionales, quienes denunciaron ante el procurador general de la nación Alejandro Ordóñez, un posible abuso de autoridad por parte de la Administración Municipal de Uribia y de algunos miembros de la junta directiva del hospital.
Ellos afirman que decidieron apoyar la reelección de Henríquez, quien obtuvo la mejor calificación entre todos los gerentes de hospitales de La Guajira, pero que hubo inconvenientes y dificultades para imprimir el acta respectiva, por lo que después apareció otra en la que no se aprobaba la reelección.
Relatan en la carta al Procurador, que después de esto el mandatario local dijo que iba a continuar con concurso de méritos para escoger al gerente, ya que según él hubo un empate.
«Creemos que esto va en contra de nuestra autonomía como indígenas, además es una falta a la verdad por parte de funcionarios públicos», aseguró Jarariyú.
En el hospital solo se está atendiendo en urgencias y los funcionarios se quejan porque no han podido cambiar los cheques de sus salarios, según afirmó Soraima Suárez trabajadora del centro asistencial.
El alcalde encargado de Uribia Fadner Javid Fonseca emitió el decreto 094 a través del cual se encarga a Apolinar Elías Rivadeneira como gerente encargado, mientras se define quién quedará en propiedad. El doctor Rivadeneira se desempeñaba como médico general en el centro asistencial, pero los empleados dicen que aún no se ha hecho presente.
