Fueron 241 indígenas emberá katío del Carmen de Atrato que se encontraban en el sector de Niquitao en Medellín, los que emprendieron su retorno al Carmen de Atrato en Chocó. Desde noviembre pasado comenzó el acompañamiento a esta población por parte de la administración municipal para facilitar las condiciones.
El grupo de indígenas había llegado a la ciudad por desplazamiento forzado, entre ellos había 115 niños que tuvieron vigilancia del ICBF. Luego del retorno la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia continuarán haciendo seguimiento.
Quienes regresaron al Chocó conforman 52 familias de la comunidad de El Doce. En Medellín muchos estaban en la mendicidad. En la ciudad se calcula que en la actualidad hay dos mil indígenas más, sin embargo, solo este grupo de 241 personas se había declarado como víctimas.
Fuente: https://telemedellin.tv.
